Desde 1998 cada 1ero de diciembre se celebra el Día Mundial de Lucha contra el SIDA.
Desde los inicios de esta lucha se han hecho importantes progresos y los resultados son muy alentadores. Sin embargo, aún queda mucho camino por recorrer.
El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) no tiene cura, pero el tratamiento permite al enfermo llevar una vida saludable y reducir casi a cero el riesgo de transmisión del virus a otra persona mediante la sangre y/o los fluidos corporales. El virus va debilitando el sistema inmunitario, generalmente a lo largo de un periodo de entre 3 y 15 años (aunque 10 años es lo más habitual), hasta causar el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). Cuando las defensas se debilitan, pueden aparecer infecciones oportunistas como la candidiasis, la neumonía o varios tipos de tumores.
Muchas personas viven con VIH durante años sin mostrar síntoma alguno pudiendo no conocer su estado cuando un simple análisis de sangre buscando anticuerpos puede confirmar la presencia del virus.
En este Día Mundial del Sida, la OMS ha lanzado la campaña bajo el lema “Acabar con las desigualdades. Poner fin al Sida”. Este año, la ONUSIDA (“Programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el SIDA”) pone como prioridad la urgente necesidad de acabar con las desigualdades que impulsan el SIDA y otras pandemias en todo el mundo. Si no se establecen acciones contra las desigualdades económicas, sociales, culturales y legales, se corre riesgo de no alcanzar los objetivos de acabar con el SIDA para el año 2030. Esto se ve reforzado por las palabras del último discurso de la Directora de ONUSIDA, Winnie Byanyima, en las que manifiesta que “… Necesitamos ya mismo infraestructuras lideradas por la comunidad y basadas en la comunidad como parte de un sistema de salud pública fuerte, respaldado por la sólida responsabilidad de la sociedad civil…”.
En el mismo sentido, el Ministerio de Salud Pública cuenta con el “Área programática ITS-VIH/SIDA” que tiene por objetivo el apoyo en la implementación de políticas integrales e intersectoriales de promoción y prevención en las infecciones de trasmisión sexual entre ellas el VIH/SIDA.
Desde SEMM, como todos los años, invitamos a la población a conocer su estado serológico. Un simple análisis de sangre buscando anticuerpos puede confirmar la presencia del virus, y comenzar con un tratamiento temprano para asegurarles a las personas que viven con VIH la posibilidad de llevar una mejor calidad de vida y una expectativa de vida similar a la de una persona sin VIH.